SERRANO RAUL ALBERTO

Ingresó a la Gerencia de Personal el 7 de mayo de 1973 y fue designado al Sector Préstamos para la Vivienda. Después de unos meses tuvo que cumplir con la conscripción. A su regreso fue destinado a la sucursal Palermo, donde trabajó como cajero.
Raúl, como la mayoría de empleados del Banco, solicitó el préstamo hipotecario para comprar la vivienda en donde viviría con su esposa, Rita Manuela y su pequeña hija María Paula. Sin embargo, ese proyecto de vida, solo duraría pocos meses: el 30 de julio de 1976, fue secuestrado junto a su esposa y desde entonces permanece desaparecido.
Un Banco ciego, sordo y mudo con los empleados que de pronto no se presentaban más a sus puestos de trabajo, pero dinámico y eficiente para cumplir con los trámites administrativos de rigor, encontró en Raúl Serrano (como en el caso de Alfredo Barbano) una víctima más para sus intimaciones.
Al drama familiar que el secuestro de Raúl y Rita habían traído a sus familias y el desamparo de María Paula, se sumaron los telegramas intimando a Raúl a presentarse a trabajar, y con el tiempo se sucederían las intimaciones para cancelar el préstamo “bajo amenaza de ejecución”.
Después de dos largos años de tramitaciones en el año 1978, se canceló el préstamo y el 19 de enero de ese mismo año, el Honorable Directorio del Banco resolvió “DAR DE BAJA por abandono de puesto a Raúl Serrano a partir del 30.7.76 fecha en que el nombrado fuera suspendido en sus funciones de conformidad con lo determinado en el Art. 29° inc. a) del Estatuto para el Personal del Banco”. Solo burocracia ante el drama, ante un proyecto de familia destruido.
En octubre del 2004, María Paula a punto de dar a luz, no vino a recibir la medalla de su padre.
Sin embargo, la Memoria y convicción de quienes desde distintos espacios, no olvidamos y creemos que hay que honrar la verdad histórica, hizo que ese mismo Banco “frío” y “burocrático”, reconociera a través del Directorio, que Raúl Serrano no abandonó su puesto de trabajo ni incumplió la cancelación de sus deudas por voluntad propia, sino que otros decidieron el destino de su familia por él.
La medalla que simboliza el reconocimiento institucional de su calidad de trabajador detenido-desaparecido, está en guarda en la casa de las Madres de Plaza de Mayo.
(Biografía aportada por la Comisión de Empleados del Banco de la Nación Argentina por la Memoria, la Verdad y la Justicia)